Todo cambia para crecer.

Se es lo que es siempre, y aceptarlo y ser fiel a eso ,es ser auténtico. Pero todo cambia, y reconocer esos cambios también es ser uno mismo.
Lo que ayer decía de una forma hoy lo puedo expresar de otra y con otros medios. Podemos acortar distancias, gracias a estos instrumentos virtuales y conocer personas que de otro modo seria imposible,o reencontrarnos con seres de nuestra vida que no esperábamos volver a ver y llevarnos gratas y no tan gratas experiencias.
Una vez , no hace mucho le dije a una amiga...sorpresas nos da la vida, refiriéndome a esto. Pasamos muchos años "cerca", pero no nos vimos, y ahora virtualmente (por suerte seguimos cerca físicamente también )la conozco y por primera vez la veo!...ahora recién la puedo llamar Amiga. Es Internet la causa o tal vez cambiamos ??
Yo creo que por suerte voy cambiando, veo lo mismo de una manera distinta. Mi mente y mi corazón se amplían con el paso del tiempo, creo que madurar sin crecer , es un grave e irreparable error. Seguramente no fue mi sabiduría la que me llevó a reconocer esto, sino los sinuosos senderos de la vida, pero de una u otra forma, me alegra muchisimo saber que sigo siendo yo,pero en constante cambio.
Que mi pasión, mi fuerza, mi esencia permanecen intactas, pero mis ideas no se limitan. Mis certezas se llenan de dudas, lo que se ,siempre es poco. Lo que aún no conozco es infinito. Lo que hoy creo mi verdad , es sólo una verdad más tan respetable como la de los otros,y en la lucha por valorar lo esencial y dejar de lado todo lo superfluo , voy apostando a la humildad e inevitablemente encuentro un camino ríspido:domar al ego! ese es el desafío más grande de nuestra existencia.
Amar a pesar de los desacuerdos, amar a pesar del dolor ,amar a pesar de lo cotidiano, amar a pesar de la incomprensión. Amar a pesar de la indiferencia. Amar en la adversidad y amar en la alegría. Amar cuando somos amados y cuando no.
Una meta muy difícil,que exige el permanente cambio, la constante comprensión ,sin perder nunca la integridad y la aceptación de nuestra vida, tal como es , que al fin y al cabo, es el resultado de lo que con ella hicimos. Y si creemos que no es así, aun estamos a tiempo de cambiarla y seguir amando , desde la simpleza del niño, que sabe que es débil, pero al mismo tiempo no se priva de soñar y esperar un mañana mejor.